Hace un par de semanas compartí un vídeo en mi perfil personal de Facebook sobre el montaje de una exposición de Richard Hamilton en el Reina Sofía, cada vez que lo veo una sensación de emoción y entusiasmo me recorre de arriba a abajo. Comenté que para mí sería el trabajo perfecto por aunar 2 de las cosas que más me gustan y para las cuales me he preparado: museos y producción. Cuál fue mi sorpresa cuando indagando sobre piezas de arte relacionadas con el mundo textil descubrí a Bauke Knottnerus, y otro vídeo me llevó a pensar que existía el proyecto perfecto que aunara 3 de mis pasiones: museos, producción y tejer.
Y es que la vida, aunque hayas querido planearla al milímetro, nunca sale como tenías previsto, quien haya leído nuestro «about» sabrá que tanto mi madre como yo venimos del mundo del Arte, en su caso la vertiente 100% creativa y práctica de Bellas Artes, en el mío 100% teórica, apasionada de la Estética, el Arte Actual, la Arquitectura y la Museografía.
Mi ámbito laboral en los últimos años se ha centrado en producción, muchos no saben exactamente qué es, y básicamente se resume en estar detrás de todo lo que la gran mayoría disfruta cuando asiste a un evento, un concierto o una exposición, y conseguir que todo salga bien y a tiempo. Y aquí es donde entra Bauke Knottnerus y su obra Phat Knits y lo que ha supuesto para mí en este momento.
Bauke Knottnerus a todos los que estéis en Pinterest y tengáis tableros relacionados con el mundo Knitter os sonará. Para quien no lo conozca es un artista holandés, estudió en la Design Academy de Eindhoven y participó con su obra Phat Knits en la maravillosa exposición Unravel: Knitwear in Fashion en el Momu Museum de Amberes en 2011. Me hubiera encantado asistir, pero por entonces mi vida no se parecía en nada a lo que es hoy…y ni me enteré de su existencia.
La exposición, comisariada por Karen Van Godtsenhoven (aquí podéis leer una entrevista), abarca pasado, presente y futuro del mundo tejido, y participaron múltiples artistas y diseñadores. Y sin poder evitarlo lo he relacionado con mi vida: mi pasado, mi presente y mi futuro (Hª del Arte, Museografía/Producción y Pearl Knitter). Estoy en formato búsqueda y captura del catálogo de la exposición, debe formar parte de mi colección, lo tengo claro.
Fuente de las imágenes
Uno de los conceptos más interesantes del discurso expositivo es como relaciona el punto con distintos momentos de la historia y algunas revoluciones, en la actualidad tejer a mano estaría vinculado a la cultura «slow» y a dejar de producir en masa.
Y viendo las imágenes y el vídeo del montaje en concreto de la obra de Knottnerus, no dejo de sonreir cuando los veo tejiendo a lo grande, mirando su iPhone para saber si ahora toca punto derecho o punto revés. Y para mis adentros me digo que sin duda hubiera sido extremadamente feliz participando en la producción de esa exposición. ¿Podría pedir más? Sería el proyecto perfecto, mi 3 en 1 ideal.
El vídeo es de lo mejor, además de ver el trabajo que hay detrás del montaje de piezas como las de Knottnerus, se ve claramente el material con el que trabaja, las agujas gigantes que en realidad son tubos, y lo que debe pesar una muestra de este artista para ser transportada por 7 personas. No dejes de verlo.
Y en estas ando, tejiendo y pensando, y sin abandonar lo que hace que vea el mundo como lo veo, porque si la Hª del Arte, la Museografía o la Producción no hubieran formado parte de mi vida, probablemente hoy sería alguien muy distinto, ni mejor ni peor, diferente.
Y cuando veo que el punto tejido está cada vez más presente en muchos ámbitos (entiéndase museos, centros comerciales, televisión, etc) me pregunto hasta cuando durará este resurgir lanero, si como cualquier moda pasará dentro de unos años, y habrá que esperar a que cumpla los 60 para verlo activo otra vez, o si realmente puede ser una revolución en nuestro comportamiento con respecto al consumo y la producción.
¿Qué pensáis vosotros? ¿Moda o Revolución?
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Uff! Clara! qué pasada de proyecto, no lo conocia y me ha encantado!
Yo espero que esto no sea una moda, sea una revolución, para mi lo ha sido, a mi me ha cambiado, desde que he empezado a tejer mi vida ha cambiado y yo también, ya no hay vuelta atrás… espero que me acompañé el resto de mi vida, y ya que no he tenido la suerte de que me enseñen mi madre o mi abuela yo si espero enseñar a mis sobrinos, hijos y nietos… ¡me encantaría!
De nuevo, increible post me tienes cada vez más enganchada y no lo digos porque te esté siguiendo los pasos de muy cerquita, sino porque realmente lo siento… Gracias!!
Ay! Vanessa, que me has emocionado y todo, para bonito tu comentario, y no solo por las cosas tan buenas que me dices sobre nuestro trabajo, lo digo por como cuentas que tejer te ha cambiado la vida, y sobre todo por la intención de traspasar tus conocimientos a las próximas generaciones. ¡Así es como se propaga el espíritu rebelde! Yo cada vez estoy más convencida de que mis abuelas, mis tías y mi madre han sido y son mujeres autónomas porque desde pequeñas supieron hacer cosas con sus propias manos, a la fuerza eso tiene que influir, no paro de investigar sobre el tema.
¡Gracias a ti siempre!Es un placer que nos estés acompañando en esta aventura PearlKnittera.
¡Un abrazo gigante!
🙂
No me cabe duda de que se trata en gran parte de moda, pero tampoco me cabe duda, de que se ha convertido en una revolución social. Un cambio radical en el ser humano que pretende recuperar los ancestros, las tertulias que antes se daban en los pueblos, los grupos de artistas, las agrupaciones literarias, etc.
El arte de tejer no consiste sólo en tener prendas nuevas en el armario y hacer regalos originales; también es dejar las prisas a un lado, reunirse con amigos en un café para tejer, organizar proyectos solidarios, compartir propósitos tejeriles y creaciones con otros, en suma, comunicarnos con los demás con más facilidad y tener una intención común con la que poder disfrutar más y mejor del tiempo.
Todo ésto forma parte de una revolución social a la que hemos llegado por la vida acelerada a la que estamos sometidos. Una vez recuperado este tipo de vida, y sabiendo que lo que nos aporta es positivo, será difícil que abandonemos lo bueno para volver a lo anterior, las prisas, el estrés, el vivir acelerado, etc.
¡Si es que no puedo estar más de acuerdo contigo! Pero claro…ya lo dicen: de tal palo tal astilla 🙂 Si hay algo que tejer me ha regalado es tener unos momentos únicos con mi familia, divertidos y productivos siempre, me siento muy afortunada, la verdad. Soy fan total de las tertulias, de las mesas de camilla, de compartir trucos tejeriles…
Así que no puedo más que estarte agradecida por todo lo que me enseñas 🙂
Beso
Jo! Asunción, ésta frase es para enmarcar! Eh? Deberíamos hacer un apartado de sentencias molonas sobre el tejido… y ya te digo que ésta tendría que estar dentro porque has resumido en unas pocas líneas un montón de ideas que creo que muchas tejedoras tenemos a día de hoy! Bravo!
Muchas gracias Soraya. Yo también estoy de acuerdo contigo en muchas de las ideas que tienes con respecto a este «nuevo mundo» o «nuevo modo» de ver lo que ocurre actualmente; soy seguidora tuya desde hace tiempo en algunas redes sociales y me gustan tus proyectos. Ojalá un día de estos podamos conocernos personalmente.
El tema es apasionante porque sin duda es una revolución necesaria. Imperan tantas tonterías y milongas que volver a lo esencial te lo piden los adentros.
Yo es que soy muy de revoluciones pacíficas y con conciencia y me gustan las personas con su punto de rebeldía que se cuestionan las cosas y se afanan por mejorarlas.
El video es de un gusto y delicadeza que impresionan. Lo que disfrutarías participando en un proyecto así, Clara. Ojalá te surja la ocasión. Un beso
¡Hola Isa! Que razón tienes, es cierto que a veces nos sale de las tripas querer cambiar las cosas, y cuando es así ya no hay marcha atrás.
Las cosas pequeñas y los detalles cambian muchas cosas poco a poco, y calan de alguna manera, por eso es posible el cambio.
El vídeo…no sé cuantas veces lo habré visto, ojalá, sí, me encantaría. Pero sabes qué? Que si no me surge me la invento, algo se me ocurrirá 🙂
Muchas gracias por pasarte por aquí y aportar tu visión, un abrazo grande! 🙂
Pues sí, Clara, menudo proyecto claruno!! No podría venirte mejor.
¡Cierto Isabel! Tiene toda mi cara 🙂
Y yo creo también que es una moda, pero de las que han venido para quedarse, por lo que representa: el hacer las cosas con calma, producir calidad y no cantidad, el disfrutar de algo hecho por uno mismo, de valorar lo que supone cada prenda… Y por la incuestionable relación que tiene con el Arte y las Matemáticas, creo que debería formar parte del currículum en la escuela. Y por supuesto, para niños y niñas, unisex total!!
Que formara parte de los contenidos de la escuela estaría muy bien, así era en la escuela de nuestras abuelas y tías-abuelas, y por eso todas tienen esa creatividad desde pequeñas, y son mujeres de lo más resolutivas. Aunque creo que en ese sentido que este tipo de actividades se impartieran en los colegios tendría muchos detractores, es una sensación, pero creo que lo asociarían al pensamiento manido del ámbito doméstico y exclusivamente femenino, cuando no lo es.
Pues con tu comentario me estoy animando a plantear contenidos enfocados a tejer con niños, a ver qué se me ocurre, pero has abierto la caja de pandora 🙂
¡Muchas gracias!
Mira qué bien!!! Precisamente!Pienso igual que tú, que habría detractores, pero sería por pura ignorancia. Porque en el arte de tejer todo son ventajas para la mente, y también para el cuerpo.
Sí, así que lo ideal es comenzar por inculcar estos conocimientos en casa. Así que… ¡Qué se preparen los little de la familia! Que llega la Knitter Revolution 🙂
Lo de enseñar a tejer en los coles es algo que ojalá empezase a pasar, ya sabéis todas que en los países nórdicos se enseña tanto a niños como a niñas a tejer en el cole, tuve una profe que es letona que no veáis como mueve las manos y creo que tejer te abre la mente a mil cosas… Sin embargo, en España, lamentablemente tiene una carga peyorativa para que la parte de moda de éste nuevo alza del tejido no sé si es buena… En fin… resumo: hay parte de moda, en España aún lo vemos cómo algo de viejas pero cada vez menos! Y… ojalá hubiese una parte de textiles en el cole! Boro, bordado moderno… telares… Soñar es posible!
Gracias por la conversación, guapas!
¡Gracias a ti Soraya! Precisamente hicimos toda una programación didáctica para impartir clases de punto en los coles, como actividad extraescolar, y nos encontramos de bruces con la realidad que comentas. Fue antes de comenzar la andadura online de Pearl Knitter. Ver que hay personas como tú nos da ánimo a retormar el proyecto, pues le pusimos muchas ganas y sabemos de todas las ventajas que trae, quizás haya que retomar este nuevo curso, o bien recuperarlo y hacerlo en otro ámbito.
Sin duda la moda es un arma de doble filo, lo que podemos hacer las que pensamos así es poner nuestro granito de arena en los pequeños detalles o proyectos para ir cambiando las cosas poco a poco.
¡Un abrazo grande!
Qué bonito el vídeo y qué pasada de proyecto. Yo no sé si esto será una moda pasajera o no, pero creo que en mi vida lo de tejer ha llegado para quedarse. A mí me enseñaron en el cole, pero se me dio fatal y recuerdo que la bufanda que teníamos que hacer la acabó mi madre, que siempre ha andado con un par de agujas entre manos. Yo hace dos años que me puse a tejer, empecé quince días antes de defender mi tesis doctoral, como método de desconexión y relax. Y desde entonces me lanzo a lo que sea, veo que las cosas que hago van mejorando y me atrevo con todo… y si sale mal, ¡el siguiente proyecto saldrá mejor!
Lo que más me gusta de ver que tejer está de moda es que no te sientes tan sola ni tan «bicho raro». Eso sí, cuando empecé a comentar entre mis amigas que tejía, descubrí que no era la única con esta afición. Aunque hay mucha gente que sigue asociándolo con una actividad de gente mayor, me encanta que cada vez más gente sea consciente de que no es así.
Hola Nisi, sí, el vídeo es muy chulo, como el proyecto, y la exposición imagino que al completo tenía que ser una pasada. Es muy curioso ir descubriendo como llegó el punto a nuestras vidas, hay muchas personas que como tú, fue por encontrar un método para relajarse. En mi caso fue algo parecido, pero recuerdo que al principio tejer me ponía nerviosa, y era por la presión que yo misma me ponía para que todo me saliera bien, con el tiempo eso ha cambiado, y ahora lo disfruto mucho más, así que a mí tejer me ha ofrecido muchas ventajas, y en mi caso igual, habrá sido por moda (aunque el punto forme parte de mi árbol genealógico, ya que tanto mi abuela, como mis tías, como mi madre se han ganado la vida tejiendo desde que tengo uso de razón) pero también ha venido para quedarse. Además disfruto cada día más descubriendo que hay más y más gente interesada.
Muchas gracias por compartir tu punto de vista con todos. 🙂
El post está propiciando opiniones de lo más interesantes. Respecto al tema infantil, estoy pensando en esas pulseras de tiras de plástico que hacen ahora los niños y son las mismas que hacíamos las de mi generación. Creo que muchos niños están deseando hacer cosas creativas con sus manos y por eso hay espacios privados que cubren esa parte que no hay en las escuelas. Lo mismo que pintan, decoran, encuadernan o cosen podrían tejer si se les muestra como hacerlo. Besitos
La verdad es que sí, Isa, es muy interesante cuando se plantean estas cuestiones y se participa en la conversación, es una manera de que todos aprendamos de lo que los demás plantean. Y sí, lo de las pulseras es tremendo, en casa al haber 2 criaturas pequeñas hemos visto como se ha intentado invadir todo con ellas, y mi hermana ni corta ni perezosa ha cogido sus herramientas tejeriles y se ha puesto a investigar como hacer cordones y pulseras para Joaquín con algodón… ¡Y él tan feliz!
Vamos a tener que volver a poner en marcha la idea de los talleres… Con la vuelta al cole ahí al lado, dan ganas!
Muchas gracias por continuar animando el cotarro.
Un abrazo grande