¿Manías? No, son detalles que si tienes en cuenta al tejer, tu vida Knitter será más productiva. Es cuestión de adquirir pequeñas costumbres y habituarte a ponerlas en práctica.
Si te gusta tejer toma nota de estas 10 cuestiones que no debes hacer y que te ayudarán a mejorar tu trabajo al tejer.
A quien le gusta tejer sabe que ha decidido tener una afición con ciertos costes, es inevitable… Los buenos ovillos son la materia prima para empezar a crear aquello que tienes en mente y que vas a disfrutar, ya sea para ti o para regalar. Es mucho mejor invertir bien, que dejarse llevar por los precios económicos y que después tu creación lanera sea imponible, bien porque a la lana le salgan bolitas, o porque te pique, o porque no sea gustosa de llevar. Compra calidad y el resultado de tu proyecto lo agradecerá.
Partiendo de la premisa de que los ovillos de calidad no son baratos, acostumbrarte a guardar cada hebra que sobre, te ayudará a que todos tus proyectos cundan más. Podrás reutilizarlas para rematar y sobre todo podrás hacer trabajar tu creatividad al crear proyectos con material sobrante, quizás un cojín, o puede que un cuello, o bien un bolso; será cuestión de investigar, combinar texturas y colores, y voilà! Nacerá un proyecto que sin las sobras no se te habría ocurrido. Recicla todas tus sobras, tu creatividad se disparará.
Los ovillos que no vienen desmadejados cuentan con 2 hebras, una interior y otra exterior. Si te acostumbras a empezar los ovillos sacando la hebra interior (hurgando con el dedo dentro del ovillo) tejer y sacar la hebra será mucho más fácil, nada que ver con estar tirando todo el rato del ovillo para que se desenrolle. Empieza los ovillos por la hebra interior y notarás que avanzas más rápido.
Lo veo constantemente, en Pinterest, en Facebook, en Instagram, en blogs… Casi siempre coincide que las imágenes que encuentro tienen las agujas dentro de un bote con la punta hacia abajo, deduzco que es para poder encontrar la numeración del grosor con más rapidez, pero eso tiene una consecuencia: con el tiempo las puntas de tus agujas se verán afectadas. Pon tus agujas siempre con la punta hacia arriba, evitarás que se despunten.
Acostumbrarte a tejer una muestra antes de comenzar un proyecto no trae más que beneficios a todo el conjunto del proyecto. La muestra es tu mejor aliada y utilizarla tiene cantidad de ventajas (te lo contaba aquí). Haz muestras y aprenderás a calcular medidas y sobre todo a conocer cómo haces tú el punto.
Hasta las tejedoras más intuitivas y agudas tienen que tomar medidas, intentar tejer a ojo es una proeza que no siempre da buenos resultados. Tanto si es una prenda para ti, o para regalar, tener unas nociones básicas de cómo medir y adaptarlo a tu proyecto es parte del proceso; puedes aprender a hacerlo leyendo este post. Que el metro de sastre forme parte de tu material de trabajo, el ojo de buen cubero no siempre funciona. Tomar medidas hará que tu trabajo tenga resultados profesionales.
En casa siempre lo he visto: cada proyecto se remata, y cuál fue mi sorpresa cuando descubrí que hay personas que cuando terminan un proyecto unen las hebras sobrantes a través de un nudito y ya está. ¡¿Cómo?! Eso no puede ser, hay que rematar la faena tejeril, con aguja lanera o con aguja de ganchillo, pero el remate es fundamental. Si rematas tus proyectos, evitarás que se deshagan al engancharse, por no decir que el resultado de la prenda del revés será pura profesionalidad y no un cúmulo de nudos que lucen como miles de bultitos en tu proyecto.
Tomar apuntes en principio te puede parecer que ralentiza tu actividad tejeril, pero nada más lejos de la verdad. Quien siembra, recoge. Si tomas nota de todas tus ideas, de los puntos que montas, de las vueltas que haces, donde te equivocaste, como lo solucionaste, etc, lo que te encontrarás el día de mañana es un montón de trabajo ahorrado y un mundo de saber. Anota todos tus pasos, es la mejor manera de empezar a crear tus propios patrones.
Sí, ya lo sé, deshacer lo tejido cuando llevas 40 vueltas, o incluso 3 (según la impaciencia de cada una) se antoja como subir una cuesta a las 15.00 h. en pleno agosto, pero no es para tanto. Hay que perder el miedo a deshacer cuando te has equivocado, pues es la mejor manera de aprender, y no te preocupes, es algo que le pasa hasta a la tejedora más experta del planeta.
¿Sabes que ocurre si ignoras la información que trae la etiqueta de tus ovillos? Que corres el riesgo de tejer un proyecto en 2 colores diferentes sin haberlo pretendido. Es fundamental apuntar la tintada y el color (son dos números distintos que traen todos los ovillos). Si estás tejiendo un sweater amarillo, negro, beige, sea el color que sea, no todos los ovillos han sido tintados al mismo tiempo, por lo tanto cambia la tonalidad. No te dejes llevar por la imprudencia y adquieras ovillos del mismo color y diferente tintada (a no ser que sea a propósito y lo tengas muy estudiado), pues una vez que lo hayas tejido se notará la diferencia y crea un efecto poco favorecedor.
Si pones en práctica estas 10 costumbres notarás que el mundo del tricot cada vez es menos misterioso para ti, descubrirás secretos y virtudes del punto tejido a dos agujas conforme vayas avanzando, y sobre todo disfrutarás del proceso de verte crecer como Knitter a la par que tus proyectos lucen cada vez mejor. Para quedarnos con la copla, repasemos el listado, pero esta vez en la versión positiva, este es el Decálogo Knitter:
¿Qué te parece? ¿Cuántas de estas costumbres llevas a cabo en tu labor tejeril? ¿Tienes algún consejo más para compartir con nosotras?
¡Te espero en los comentarios!
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No me puede venir mejor! sólo hacia 4 de los 10 :(… y… me enseñas a rematar?
Me encantan los post, cada vez más útiles, explicativos y sencillitos (para torponas como yo).
Mil gracias!!
¡Que bien Vanessa! Me alegro de que te sea útil el Decálogo Knitter, la torpeza es solo una traba mental, así que ve eliminándola de tu cabeza, verás que entre poner en práctica el decálogo y lo que estás avanzando en tu proyecto PearlKnittero, no habrá meta que se te resista.
¡Gracias a ti! Un abrazo 🙂
Ah! Vanessa, puedes mirar el post «Aguja de ganchillo para coser y rematar», así vas viendo el proceso, y en breve miramos como se hace con aguja lanera. Work in progress… 🙂
Muy muy práctico!!! Y me encanta el resumen final en positivo 🙂 Yo también cumplo solo con 3 puntos :-/ pero estoy en ello con los demás…
Lo imprimo y lo cuelgo en mi knitter corner!!
¡Gracias Isabel! Que bien que te resulte práctico, y ni qué decir que vayas a colgarlo en tu Knitter Corner… eso ya es la pera! ¡Muchas gracias! Ahora me da curiosidad saber qué puntos son los que lleváis a cabo y los que no. 😉
Pues mira, siempre compro ovillos de calidad, incluso para hacer una manualidad infantil… La lana o el algodón sobrante los guardo como oro en paño, por si dan para un miniproyecto. Intento siempre empezar el ovillo por la hebra interior, pero hay veces que me desespero al no encontrarla, ya con el ovillo medio deshecho, y empiezo con la exterior (¿para cuándo un tutorial de cómo sacar la hebra interior?! 😉 Las agujas las guardo en horizontal, es decir, que tampoco así corren el riesgo de despuntarse. Y desde que os sigo hago muestras, tomo medidas, anoto (casi) todo el proceso y deshago lo tejido si me equivoco (no siempre, la verdad, y me cuesta lo mío). Lo de apuntar tintada y color… no lo he hecho jamás, pero desde que supe de su utilidad jamás tiro las etiquetas de los ovillos: tengo una caja pequeña donde voy guardando las etiquetas con una hebra, muy organizado 🙂
Vamos, que al final casi que lo cumplo todo, al menos lo intento 🙂
Un abrazo!!
Que maravilla, eres muy aplicada! Así da gusto, al final es cuestión de crear el método de trabajo que a cada uno le venga mejor, a mi me funciona así, y hay mucha gente que también le ve el lado práctico, así que lo ideal es compartir todos los trucos que tengamos para aprender de todos, porque al final siempre conoces a otro knitter que tiene tal costumbre o tal otra que resulta de lo más útil! Porque lo de guardar la hebra con la etiqueta del ovillo me ha conquistado. ¡Apuntada queda! Y lo de sacar la hebra desde el interior del ovillo… al final sale, a veces más rápido y a veces menos, pero sin duda yo lo prefiero a empezar el ovillo por la exterior…
Muchas gracias por tu contribución, seguro que a más de uno le viene estupendo tu comentario.
Un abrazo bien grande 🙂 🙂
Hola clara hace muy poquito que he descubierto tu blog y me parece muy interesante , después de muchos años sin tejer nada me ha vuelto a dar la fiebre tejeril y es que no parooo , lo recomiendo a todas y todos que los hombres también se tendrían que animar a tejer … que no les pasara nada porque cojan unas agujas jajjajajaaj . Es el mejor des estresante que hay , el tener que estar contando puntos y el simple ruidito de las agujas click , click , click hace que te olvides de todo . De los diez consejos que nos indicas hacia caso omiso al 5 , 6 y al 8 , y me he dado cuenta de que son de vital interés en especial el 5 . Gracias por compartir todos estos consejos con nosotras .
Hola May. La verdad es que sí, que el nº 5 (tejer muestras) es la base de casi todo. Me alegra saber que te gusta el blog y que te resulta útil. ¡Tienes razón! Tejer es un placer que aún muchos desconocen, yo no he conseguido aún que ningún hombre cercano a mi le de por tejer, aunque lo que tengo claro es que quien lo prueba, acaba preso de la «fiebre tejeril» como tu dices.
Gracias por compartir tu experiencia, y por tus palabras.
Un abrazo 🙂
uy uy uyyy, a mi me faltaban los ultimos puntitos…..este veranito que he recuperado con fuerza las agujas prometo cumplirlos…..;)
gema
¡Que bien Gema! Mola que dentro de tus planes veraniegos entre tejer, y si ya aplicas el Decálogo Knitter ni te cuento! Espero que a la vuelta compartas tus avances 🙂 Un abrazo grande
Muy buenos tips gracias por compartirlos me seran muy utiles. Gracias
¡Hola Delfina! Que bien que te resulten útiles.
Gracias a ti.
Abrazo 🙂
Alguno fallo, porque no me puedo resistir a los hilos baratitos para sacar muestras y hacer cestitos y pruebas de los inventos que se me ocurren, pero en general creo que me porto muy bien. Y sólo hilos baratos, en el caso de las lanas no pico nunca. Pero la calidad de hilo y la lana se refleja en el resultado de la prenda, eso es totalmente cierto. Un truquillo para las sobras de hilos y lanas: algunas veces utilizo unas hebras para empaquetar un regalo especial. Con un papel chulo, le pones unas hebras de lana solas o combinadas con una hebra de cuerda, o de hilo rústico, y amarras el paquetito terminando con una lazada, y te queda muy molón, y sobre todo, muy personal. Besitos.
Hola Maricarmela: Para la creación de cestos y pruebas es buena idea tener material de back up, así se puede practicar una y otra vez, y hacer los 1000 experimentos que una quiera.
Ay! Y me ha encantado tu truco para el uso de las sobras, es cierto, es muy buena idea, dando el toque personal al empaquetado. ¡Muchas gracias por compartirlo! 🙂 🙂 🙂
Un abrazo.
Me interesa todo lo que sea tricotar y aprender metodos nuevos.
Estupendo Dolors, a nosotras también nos encanta investigar y aprender cada día cosas nuevas.
Un abrazo